Musicalmente hablando, la Cofradía de la Santa Vera+Cruz está siempre muy bien representada. Además de las dos bandas de música que forman parte de nuestro día a día, la Cofradía también dispone desde hace 27 años de una Coral que pone letra en forma de canción en aquellos actos donde se requiere su presencia; eucaristías, conciertos de Navidad, recitales del Día de la Cruz, etc...
Pero fue en el año 2001 cuando Don José Sebastián Angulo (director de la Coral) propuso crear un coro de voces blancas formado por los más pequeños de la Cofradía. Y así fue; la tarde del 1 de Mayo de 2001 se presentaba en el tradicional recital del Día de la Cruz, al nuevo coro de niños y niñas que tomaría por nombre Coro “Aromas de Mayo”.
No podía ser de otra forma; el Señor del Convento llamaba a todos aquellos niños y niñas para poner “el toque final” a las canciones que se cantaban en su honor.
Muchas son las emociones que surgen cuando se escucha cantar al coro Aromas de Mayo, pues resulta casi imposible de creer cómo niños y niñas tan pequeños (algunos sin apenas saber leer) cantan con tanto sentimiento hacia nuestros Sagrados Titulares. Son pocas las personas que evitan emocionarse cuando escuchan las letras de las canciones tan significativas para los Hermanos de Arriba.
Hoy día, muchos de los componentes de la Coral de la Santa Vera+Cruz han formado parte de los orígenes del Coro Aromas de Mayo, dejando paso a la cantera que viene detrás empujando fuerte, a pesar de ser tan pequeños. Son trece los años que han pasado desde que se cantara por primera vez al Señor del Convento.
Con las letras de las canciones, cedidas por diferentes cofrades, siguen haciéndonos vibrar de un modo especial.
“…Dicen que son aún pequeños,
más no por eso son menos,
son Aromas de Azahar,
son AROMA DE ROMERO.
Y cuando cantan al Señor,
al llegar el Día de la Cruz,
sus corazones laten fuerte,
y brilla en ellos una luz,
se sienten, se sienten VERDES...”.
Se sienten Hermanos de Arriba, y el orgullo les invade al igual que los que somos un poco mayores que ellos y ellas. Participan en la Cofradía a su manera, poniendo la voz allá donde cantan y dulcificando los mejores momentos que en la Cofradía celebramos.